Esta noticia no tendría más importancia sino fuera porque estos brillantes japoneses son los autores del proyecto de ampliación del I.V.A.M. de Valencia que ha sido paralizado indefinidamente por nuestra administración. La intención de este blog no es la de politizar ni polemizar sobre este asunto, pero no se que tipo de razones han impulsado a los políticos valencianos a marginar el proyecto en cuestión, pero lo que si se es que si lo hubiera firmado Calatrava ya estaría en funcionamiento hace tiempo.
La intervención como podéis ver respetaba totalmente el edificio actual y ampliaba los usos colmatando la manzana hacia el Barrio del Carmen. Es cierto que había que expropiar los bloques de viviendas que invadían el espacio natural de un edificio publico de la envergadura de este, pero después de la barbarie que está ejecutando el Ayuntamiento de Valencia en el Cabañal "la expropiación" nunca más será una excusa.
El cubo perforado, liviano y permeable, se posaba sobre el centro creando una segunda piel que cualificaba los espacios exteriores, dotándolos de sombra y protección para posibles exposiciones al aire libre. Mucha gente dijo que rompía con la estética del barrio, que era desproporcionado, pero lo cierto es que iba a dotar a la sede del Instituto Valenciano de Arte Moderno de una personalidad que ahora adolece. Intervenciones como el Centro Pompidou en Paris o en su día el Museo Guggenheim de New York también rompieron los moldes urbanísticos y arquitectónicos de sus ciudades para revitalizar el conjunto.
Enhorabuena Sanaa por vuestra arquitectura y por vuestra especial sensibilidad. Solo espero, como valenciano, egoístamente hablando, que este reconocimiento internacional que ahora se os otorga haga recapacitar a nuestra administración y desbloqueen esta absurda situación.